\nTodos los chilenos hemos crecido con Isidora Aguirre en nuestro inconsciente, tal vez sin saber qui\u00e9n es esta gran mujer, dramaturga y escritora. Su obra \u201cLa P\u00e9rgola de las Flores\u201d es parte de nuestra alma nacional. Sin embargo, poco se sabe de la \u201cNen\u00e9\u201d como la llamaban los m\u00e1s cercanos, autora de muchas obras trascendentales del teatro chileno, entre ellas \u201cLos que van quedando en el camino\u201d, que form\u00f3 parte de la selecci\u00f3n Bicentenario que se present\u00f3 en el Festival Santiago a Mil 2010.<\/p>\n

El pasado viernes 25 de febrero se march\u00f3 quiz\u00e1s para continuar su pasi\u00f3n de escribir en el cielo, desde donde nos seguir\u00e1 sorprendiendo con su justa pluma y nos acompa\u00f1ar\u00e1 con todas las obras que nos leg\u00f3, siempre cercanas a los temas sociales y episodios de nuestra historia.<\/p>\n

La dramaturga chilena Isidora Aguirre, naci\u00f3 en Santiago en el a\u00f1o 1919. Trabaj\u00f3 como escritora e ilustradora de libros infantiles y curs\u00f3 estudios de trabajo social y de direcci\u00f3n cinematogr\u00e1fica. Recibi\u00f3 el Premio Casa de las Am\u00e9ricas en 1969 y Premio Municipal en Chile en 1970. Incursion\u00f3 tambi\u00e9n en novela y memorias. En 2009, con motivo de su cumplea\u00f1os N\u00ba 90, la Universidad de Santiago de Chile, USACH le rindi\u00f3 un homenaje, donde diversos investigadores teatrales presentaron su visi\u00f3n de la escritura de esta prol\u00edfica autora en presencia suya.<\/p>\n

Su pieza emblem\u00e1tica es \u201cLa P\u00e9rgola de las Flores\u201d (1960) que encabeza el listado de las creaciones teatrales m\u00e1s vistas en el pa\u00eds. A partir de los a\u00f1os 60 desarroll\u00f3 una l\u00ednea de creaciones que introducen elementos del teatro \u00e9pico o brechtiano como \u201cPoblaci\u00f3n Esperanza\u201d (1959), co-escrita con el novelista Manuel Rojas; \u201cLos Papeleros\u201d (1962); \u201cLos que van quedando en el camino\u201d (1969) y \u201cRetablo de Yumbel\u201d (1985), todas basadas en hechos reales y antecedidas de un exhaustivo proceso de investigaci\u00f3n.<\/p>\n

El grupo de piezas hist\u00f3ricas lo integran, entre otras, \u201c\u00a1Lautaro!\u201d (1982), \u201cDi\u00e1logos de fin de siglo\u201d (1988) y \u201cManuel Rodr\u00edguez\u201d (1999). Sus obras m\u00e1s recientes son \u201c\u00a1Subiendo\u2026 \u00faltimo hombre!\u201d y \u201cLos libertadores Bol\u00edvar y Miranda\u201d.<\/p>\n

En mayo de 2009 el Festival Internacional de Teatro Santiago a Mil decidi\u00f3 programar en su XVII versi\u00f3n a Chile como pa\u00eds invitado de honor. El sello fue recuperar, para las actuales y futuras generaciones, la memoria del teatro chileno que ha dejado huella. Fue as\u00ed que se program\u00f3 el montaje \u201cLos que van quedando en el camino\u201d, a cargo de Guillermo Calder\u00f3n y en la que participaron los integrantes del reparto original. Su presentaci\u00f3n fue un \u00e9xito, aclamada por la cr\u00edtica y el p\u00fablico.<\/p>\n

La obra representa el levantamiento y la posterior masacre de campesinos ocurrida en el poblado sure\u00f1o de Ranquil en 1934 y su mismo t\u00edtulo contiene una cita del Ch\u00e9 Guevara, quien, en los Pasajes de la Guerra Revolucionaria, escribe: \u201c\u2026de los que no entendieron bien, de los que murieron sin ver la aurora, de sacrificios ciegos y no retribuidos, de los que van quedando en el camino, tambi\u00e9n se hizo la revoluci\u00f3n\u2026\u201d.<\/p>\n

De estructura coral, se emplean testimonios de las v\u00edctimas de la matanza. El tema es el derecho de propiedad de la tierra, un problema muy candente en la \u00e9poca en que escribi\u00f3 la obra. La autora presenta los hechos al modo brechtiano, poniendo en relieve las contradicciones internas de los mismos, de manera que sean los espectadores quienes saquen sus propias conclusiones. Cuando se remont\u00f3 por primera vez, el montaje gener\u00f3 reacciones encontradas, precisamente a ra\u00edz de la vigencia de los problemas aludidos en la obra.<\/p>\n

Para Guillermo Calder\u00f3n, director de \u201cLos que van quedando en el camino\u201d esta obra de Isidora Aguirre \u201cdemuestra la profunda relaci\u00f3n entre emoci\u00f3n y pol\u00edtica. En ese sentido es una profunda expresi\u00f3n del contexto cultural de la \u00e9poca que anticipa la llegada al poder del gobierno de la Unidad Popular. Por eso no es estrictamente una obra hist\u00f3rica, sino que una obra que reproduce el profundo estado de anticipaci\u00f3n colectiva a las puertas de un proceso revolucionario.<\/p>\n

Seg\u00fan Calder\u00f3n \u201cla obra es un hito fundamental en la obra dram\u00e1tica de Isidora Aguirre. El contenido pol\u00edtico de su teatro cobra aqu\u00ed una intensidad particular. Citando al Che Guevara y a Fidel Castro en el comienzo y final, la obra es una de las m\u00e1s profundas y frontales expresiones de la imaginaci\u00f3n de la cultura de izquierda de la \u00e9poca. El optimismo y la anticipaci\u00f3n fatalista de los personajes se combinan para definir anticipadamente la historia de la izquierda y del movimiento campesino en los \u00faltimos 40 a\u00f1os\u201d.<\/p>\n

Si algo se puede afirmar de Isidora Aguirre es que trabaj\u00f3 incansablemente por retratar y denunciar en sus obras episodios de injusticia social y momentos hist\u00f3ricos para formar y proporcionar al p\u00fablico una nueva forma de comprender su entorno y sociedad.<\/p>\n

Gracias, Isidora.<\/p>\n

Entrevista a Isidora Aguirre en 200 A\u00f1os del Teatro Chileno, Festival Santiago a Mil 2010<\/strong>
\n\n